Miles de manifestantes, entre trabajadores del Poder Judicial y estudiantes de Derecho, se concentraron la mañana de este martes a las afueras de la Cámara de Senadores, sobre Paseo de la Reforma, para expresar su rechazo a la aprobación express de la polémica Reforma Judicial impulsada por el Presidente de México.
“¡Poder Judicial, contrapeso nacional!, ¡Señor, senador, detén al dictador!”, fueron algunas de las consignas.
Incluso, desde la madrugada se sumaron trabajadores de otros estados como Aguascalientes, Jalisco, Nuevo León, Nayarit, Oaxaca, entre otros.
“Lo que nosotros intentamos no es proteger privilegios […] Vamos buscando una reforma profunda, de raíz, pero no de esta forma, por caprichos, para darle un regalo a alguien”, declaró Carlos Ramírez, secretario de juzgado de 4° distrito de Aguascalientes.
Cabe mencionar que, para pasar está reforma constitucional, se necesitan ⅔ partes de la Cámara, que son 86 votos a favor, por lo que, luego de que los experredistas José Sabino y Araceli Saucedo se fueron a Morena, el partido y sus aliados solo necesitan conseguir un voto de la oposición para pasarla. Y ese podría venir del panista Miguel Ángel Yunes, quien no se presentó a la sesión, pero pidió licencia para separarse del cargo.
De acuerdo con sus compañeros de bancada, a él y su familia se les presionó con presunta impunidad por diversas averiguaciones.
Bajo este contexto, al tomar la palabra en el estado que se colocó a las afueras del recinto, el magistrado Pedro Ciprés Salinas, del tercer Circuito en Jalisco, señaló que un voto comprado, no puede tener ningún valor jurídico.
Todos los que somos juristas y estamos aquí, sabemos que un voto comprado, por la cualquiera que sea la circunstancia, no puede tener valor jurídico”, explicó.
