La uva –agrupada en racimos y consumida a medianoche cuando suenan las 12 campanadas– es el producto agrícola más distintivo y demandado para el ritual de los 12 deseos para el Año Nuevo.
Por ello, la Secretaría de Agricultura informó que se registró un incremento de 6.2 por ciento en la producción nacional de uva de mesa en 2022, y un valor de producción de 10 mil 660 millones de pesos el año pasado, por lo que se encuentra garantizada esta fruta en centrales de abasto, tiendas de autoservicio y mercados de todo el país.
Asimismo, destacó que que 11 entidades producen uvas y Sonora se posicionó en el primer lugar con 307 mil 152 toneladas, es decir, 80.6 por ciento del total nacional.
LA UVA, UN SIMBOLO DE LA ABUNDANCIA
El comer 12 uvas es un ritual muy común durante las primeras campanadas del Año Nuevo, pues es símbolo de abundancia y de buenos deseos para el año entrante.
Cada uva representa un deseo o un propósito para cumplir durante los siguientes 12 meses del nuevo año. También, se tiene la creencia de que las uvas representan los 12 meses del calendario y de consumirlas todas en un minuto darán buena suerte durante el resto del año.
Por otra parte, especialistas destacan que su consumo aporta al cuerpo humano fibra en forma de celulosa, vitaminas A, C, E, B1, B2, B3, B6 y minerales como calcio, fósforo, sodio, potasio, hierro, cobre, magnesio y zinc, ácido fólico, glucosa y fructosa. En su conjunto proporcionan antioxidante natural y contribuyen a cuidar el sistema inmunológico, evitar estreñimiento y eliminar ácido úrico. Las uvas también ayudan a hidratar la piel al aplicarlas tópicamente.