El primer ministro canadiense Justin Trudeau y el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, criticaron los comentarios racistas del presidente Donald Trump y se comprometieron a combatir todas las manifestaciones de odio y de incitación a la violencia.
Durante su reunión, ambos líderes criticaron los comentarios del mandatario estadunidense, quien el pasado fin de semana escribió en su cuenta de Twitter, refiriéndose a cuatro legisladoras demócratas: “regresen y ayuden a reparar los lugares totalmente rotos e infestados por el crimen de donde vinieron”.
En la declaración final de la cumbre, ambos líderes se comprometieron a reforzar el combate a todas las manifestaciones de odio y de incitación a la violencia.
Trudeau hizo además un llamado a la Unión Europea para fortalecer su cooperación en la lucha “contra los movimientos populistas y nacionalistas que minan la democracia en el mundo”.