Por fin, entre el 28 de abril y el 23 de mayo se podría dar sentencia a los responsables del mayor atraco en este siglo hacia un individuo en Francia. La víctima fue Kim Kardashian y ese robo se registró hace ocho años, cuando la socialité visitó París para participar en la Semana de la Moda del 2016.
Las joyas que le extrajeron del hotel en que se hospedó estaban valuadas en más de nueve millones de dólares. En 2017 se supo que el oro fue fundido y las piedras preciosas, retalladas, y así se vendieron en el mercado negro
Entre lo robado estaba el anillo matrimonial que le dio Kanye West. Doce personas de las 17 detenidas en ese entonces fueron implicadas y esperan el juicio, que estaba programado para el próximo año, pero que ya quedó fijado para este 2024.
Previo a esto, uno de los responsables del robo escribió una carta a la socialité para pedirle perdón por los daños psicológicos que le ocasionó este atraco.
