Tras reconocer que la gestación sustituta es un tema polémico, la presidenta del Senado, Olga Sánchez Cordero, destacó la necesidad de regular a través de un marco legal un hecho que ya existe en la sociedad como vía para que las parejas puedan ejercer el legítimo derecho de buscar descendencia ante los riesgos de salud que enfrentan las mujeres y de mercados ilícitos.
Señaló que hay “evidencia documentada sobre casos de abuso, de comercialización ilegal, la aparición de elementos posiblemente constitutivos de ilícitos en torno a los sistemas locales de salud en los que hoy se permite esta práctica, pero que además en algunos casos ni siquiera está regulada ni contemplada”.
Señaló que el 17 por ciento de las parejas no pueden concebir, y este porcentaje se va incrementando, lo que se convierte en un “calvario”, por los tratamientos largos y costosos que representan. Y la gestación sustituta se torna una oportunidad para lograr el propósito de tener un bebé.
