El Parlamento de Francia, compuesto por la Asamblea nacional y el Senado, aprobó el proyecto que considera obligatoria la aplicación de la vacuna contra el Covid-19, así como el pase para poder ingresar a supermercados, restaurantes y otros lugares.
De esta forma se validó el certificado sanitario, el cual debe especificar que la persona cuenta con el esquema de vacunación en proceso o completo. Si este no es el caso, deberá presentar una prueba reciente que muestre un resultado negativo al virus.
Aquellos que no hayan acudido a los centros cuando les correspondía, tendrán como fecha límite el 15 de noviembre para hacerlo.