En lo que fue considerado como un hecho sin precedente, el Senado de la República reconoció al pádel como un deporte de origen mexicano, con lo que se convierte en la primera disciplina deportiva que se creó, estructuró y se expandió, teniendo gran repercusión en el mundo, ya que hoy se práctica en más de 40 países.
“Por eso de acuerdo con el director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el arqueólogo Diego Prieto, ya tomamos el acuerdo de promover de que se haga la propuesta de que el juego de pelota de hule prehispánico sea declarado como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad empezando por buscar la salvaguarda urgente de la elaboración de sus pelotas que esta por perderse”, destacó el Embajador del World Padel Tour, Ignacio Soto Borja, tras recibir el reconocimiento del Senado de la República por su intenso trabajo de impulso y difusión del pádel.
Con este paso histórico, se evidencia que un juego netamente mexicano, que tuvo su origen en Acapulco, Guerrero, en 1969, ha logrado traspasar fronteras. Actualmente, el pádel es promovido por el Comité Olímpico Europeo para formar parte de los Juegos Olímpicos de Cracovia, Polonia.
En este paso trascendental, el Senado también reconoció de manera póstuma al empresario Enrique Corcuera, quien creó hace más de cinco décadas esta disciplina; además, la distinción se hizo extensiva a Viviana Corcuera, viuda del inventor de este deporte mexicano.