En dos ciudades fronterizas de Texas, en Estados Unidos, comenzaron las audiencias de migrantes que solicitan asilo en territorio norteamericano.
En Laredo, se atendieron casos a través de una videoconferencia. Los detractores han criticado el procedimiento debido a que es cerrado al público y dificulta a los abogados el acceso para brindar representación legal.
Los migrantes expresaron su temor de ser enviados de regreso a México.
Los migrantes son parte de una política implementada por el gobierno del presidente Donald Trump llamada Protocolos de Protección a Migrantes, mejor conocida como el programa “Permanencia en México”.