¿Por qué es importante siempre tener que estar felices?… ¿Por qué la sociedad nos ha impuesto la idea de la felicidad?… ¿Si por el momento no estoy feliz, significa que soy un infeliz?…  

David Salinas, psicólogo español, a través de su libro “La dictadura de la felicidad”, comenta: “¡Soy infeliz… y me alegro!”. 

¡Ojo!, el autor explica, “no nos dejemos llevar por el título”, lo que él busca es hacernos entender, la “imposición” de tener que “ser felices” a como dé lugar, en el contexto de que nos han vendido la idea de una vida idealista que es irreal.  

El autor de 42 años de edad, detalló que cada uno puede entender la dictadura de la felicidad como una cosa distinta. Y explica que, para él, es una imposición social, cultural, a través de la cual, parece que siempre hay que estar bien y que no se les permite a las personas estar mal. 

A decir de él, aunque pareciera una frase muy trillada, para ser felices, tenemos que aprender a ser infelices, tenemos que movernos por la infelicidad para conocer, que te hace feliz, qué te gusta, que no. Aclara que no todo es tan bonito, ni sencillo y está bien, no pasa nada, son situaciones momentáneas que tenemos que vivir.  

¿Pero entonces qué es la felicidad?, el psicólogo explica, la felicidad es eso, es un estado de ánimo.  

Qué lo llevó a escribir este libro, bien como psicólogo también tiene crisis como todo el mundo, llegó un momento en que no lo estaba pasando bien. Y fue en ese momento cuando pensó: ¡Soy infeliz… y me alegro!; explicó que se sintió muy bien, porque lo que estaba pasando realmente era un estado de ánimo que no construye su identidad. 

Y concluyó en que, como seres humanos tendemos a construir nuestra identidad en función de las cosas que nos pasan y de cómo nos hacen sentir. Entonces, si estamos tristes, resulta que somos desgraciados. Si fracasamos, resulta que somos perdedores. Eso es totalmente nocivo. 

La felicidad es un estado y, como estado, es transitorio. Es un estado subjetivo de ánimo en el que la persona se siente más o menos feliz según la evaluación que está haciendo de su vida en ese momento. Por eso la felicidad no es algo inmutable y es importante tener en cuenta eso.  

Por lo que recomienda conocernos, hacer ejercicio, platicar con la gente, salir a caminar, es decir, mantenernos siempre activos en cosas que nos gustan y no enfocarnos en la situación o problema que nos está pasando para así poder cambiar nuestro estado de ánimo y sentirnos bien con nosotros mismos.