Una amenaza a la privacidad, la seguridad y la no discriminación en el ejercicio de los derechos humanos representa la creación de la CURP biométrica y la Plataforma Única de Identidad a través de las iniciativa de reforma a las leyes General de Población y en materia de Desaparición Forzada.
Así lo reveló la organización civil especializada en materia de ciberseguridad, Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D) sobre las propuestas de la titular del Ejecutivo, Claudia Sheinbaum.
Al respecto, consideraron que la integración de los datos biométricos como el marco facial y la huella dactilar dará origen a una base de datos centralizada, masiva y obligatoria. Por lo tanto, ofrecería una gran recompensa a los ‘hackers’ su vulneración.
Si se concretara una vulneración de la base de datos biométricos, podría exponer a las personas a suplantaciones de identidad e, incluso, casos de discriminación.
Además, la organización planteó que las reformas tienen el propósito de establecer el CURP como la única fuente de identidad, lo que significa que perderán validez como credencial de elector y el pasaporte.
En este sentido consideraron preocupante que se establezca la obligación de hacer una autenticación digital, sin distinción. Además, que exista mayor vigilancia sobre la actividad de las personas al requerir el CURP para cualquier trámite público o privado.
