Uno de los misterios de la egiptología era un faltante en las figuras de dioses y faraones. Se hacía para “matar” las antiguas tradiciones e imponer las nuevas. ¿De qué estamos hablando?
En el Egipto antiguo, se acostumbraba “asesinar” a dioses y faraones rompiendo la nariz de sus estatuas y grabados para quitarles el aire como símbolo de un nuevo orden luego de guerra civil o conquista.