Real Madrid pasó de la impotencia en la Liga de Campeones a acariciar el liderato de LaLiga EA Sports, que tiene a tiro, a un punto del Barcelona y con un partido menos, enlazando su tercer triunfo liguero consecutivo en un duelo ante el Getafe sentenciado en 38 minutos, que se convirtió en una lucha de Kylian Mbappé contra sí mismo, tras reencontrarse con el gol pero con una impotente lucha ante el desacierto en el remate.
Nunca la figura de Mbappé había empequeñecido tanto en su carrera. Sintiendo la presión de portar el escudo del Real Madrid, dio un paso atrás en un momento perfecto para recuperar la confianza perdida. Penalti sin Vinícius en el campo. Debía de asumir la responsabilidad y tras fallar en Anfield, dejó el balón a Bellingham.
Su instante para silenciar algunos silbidos que ya alimentaban la duda de la grada del Bernabéu, llegó donde siempre brilló. Corriendo al espacio, zafándose en carrera y con un disparo lejano pegado al poste que liberó tensiones. Suyas y del Real Madrid que encontró en la efectividad ofensiva el mejor aliado para enterrar las malas sensaciones de Anfield. Con una mejoría defensiva en una zaga en la que se asienta Raúl Asencio con comportamiento de veterano más que de canterano.
Tres victorias seguidas ligueras tras el bofetón del clásico y el inesperado bache del Barcelona dejan al equipo de Ancelotti con el liderato al alcance de su mano. A un punto y con el partido de Mestalla por recuperar. El contraste entre la duda en ‘Champions’ con tres derrotas dolorosas y la firmeza en LaLiga que otorgan amplios triunfos ante Osasuna y Leganés más el Getafe.
(Con información de EFE)