El domingo 1 de diciembre, el presidente estadounidense, Joe Biden, anunció que firmó un indulto a favor de su hijo Hunter Biden, que en junio fue hallado culpable de tres delitos relacionados con armas de fuego y condenas por impuestos, esto al considerar que sus problemas judiciales fueron instigados por sus rivales políticos.
A través de un comunicado, aseguró que su hijo fue “imputado de manera selectiva e injusta”.
Esto a pesar de que el mandatario había reiterado en varias ocasiones que no utilizaría la prerrogativa del perdón presidencial para resolver los problemas legales de su familia.
Cabe mencionar que esta concesión oficial de clemencia no puede ser rescindida por el presidente electo Donald Trump.
Además, el perdón llega en un momento sin riesgo político para el aún presidente, que tras renunciar a su reelección y a sus 82 años de edad abandonará la vida política el 20 de enero, cuando entre el nuevo gobierno.