Nuevas medidas anunció el gobierno de Honduras para las cárceles, luego del motín que se reportó en la prisión femenil de Tamara, donde murieron 46 internas.
Entre las disposiciones están que los militares tengan el control de las 21 cárceles del país, por un año y a partir del 1 de julio; además del traslado hacia las Islas del Cisne, de los líderes de las pandillas que ya están detenidos.
Xiomara Castro, la presidenta hondureña, aprobó extender el estado de excepción que se viene aplicando desde diciembre, para hacer frente a la creciente violencia y las extorsiones de las que son víctimas transportistas, comerciantes y la población en general, así como dejar las actividades de seguridad pública en manos de las fuerzas armadas, que actuarán de manera conjunta con la policía nacional.
