Con modificaciones de último momento que se entregaron por escrito y con la ausencia del PRI, PAN, PRD y MC; Morena y sus aliados en la Cámara de Diputados, aprobaron en “fast track” el llamado “Plan B” de la Reforma Electoral.
Contempla reducción de salarios para consejeros del INE y magistrados electorales, quienes no podrán ganar más que el presidente de México; también se compacta la estructura del Instituto Nacional Electoral y el Tribunal Federal Electoral; desaparece el Programa de Resultados Preliminares para dar paso al conteo de votos el mismo día de la elección; además se reduce el tiempo de la organización de los comicios.
Para blindar al PT y Partido Verde, se aprobó la posibilidad de transferir votos entre partidos que vayan en alianza; mientras que un partido perderá su registro si no obtiene el tres por ciento de los votos en elecciones presidenciales y del Congreso de la Unión, salvo que haya conservado su registro como partido local.
También se les permitirá a los partidos políticos usar los remanentes de sus recursos para financiar elecciones subsecuentes; mientras que para el caso de los legisladores que busquen reelegirse, deberán separarse primero de su cargo para poder participar en el proceso electoral.
Además, se define que la propaganda gubernamental serán aquellos escritos, publicaciones, imágenes, grabaciones y proyecciones difundidas con cargo al erario; mientras que se considerará violatorio de la ley, “la difusión de propaganda política o electoral que contenga expresiones que calumnien a las personas, partidos políticos o a los gobiernos emanados de estos”.
En el texto de la iniciativa se especifica que se garantizará el voto de personas en prisión preventiva, personas con discapacidad que estén en “estado de postración”, así como el voto electrónico para mexicanos en el extranjero.
Respecto a los recursos que integran los fideicomisos de pasivo laboral y de infraestructura inmobiliaria del INE, estos se utilizarán para cubrir indemnizaciones, y una vez cubiertos estos pagos, se extinguirán y liquidarán estos fideicomisos; y sus remanentes se entregarán a la Tesorería de la Federación.
Finalmente, como parte de artículos transitorios, se puntualiza que las modificaciones no se aplicarán en las elecciones del próximo año en Coahuila y el Estado de México, y se detalla que se mantendrán los actuales módulos del INE, donde se tramitan las credenciales de elector.
