La pandemia por covid obligo a realizar clases en línea, pero no diluyó del todo la violencia entre pares, entre alumnos de primaria y secundaria, que no olvidaron la agresión verbal, física o por internet
“la secundaria que va, no tiene la capacitación los maestros, la actitud de ayudar, ni mucho menos. Azcapotzalco. No está para saberlo, pero a ella la golpeaban porque los novios de las chamacas la volteaban a ver. Hicimos una denuncia con el director y nos mandó a paseo, pues ya va a salir, digo, pues, ya que tiene que tener testigos, digo por Dios, llevaba los golpes mi sobrina”
Es la testimonio de la tía de una joven estudiante de tercero de secundaria, que expresa su preocupación por las agresiones dentro y fuera de los planteles escolares, antes y después del confinamiento por covid
“no supimos, ya como trabajamos, mucha perdedera de tiempo. Pues ya más que nada, se la lleve tranquila, se aleje de provocaciones y hasta ahora, ya gracias a Dios, va más o manos. A otra sobrina, la acuchillaron, lo mismo, nadie hizo nada. La acuchillaron su piernita y no hizo nada. ¿en esa misma secundaria? En esa misma, mi sobrina iba en segunda, pero ya acabó su preparatoria. Porque van otros sobrinos a esa secundaria y es a donde te toque”
De acuerdo con investigadores del Departamento de Psiquiatría de Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNAM, algunos estudiantes consideran que ejercer la violencia verbal, física o cibernética en contra de otros alumnos repetidamente, les genera ganancias como estatus y poder
“Se dan cuenta que a partir de eso puede obtener popularidad y estatus y se perpetua, poder, por supuesto, no podemos hablar de violencia sino hablamos de poder. La popularidad, el sentirse admirado, a partir de ser osado y rebelde, ganas respeto por parte de tus pares, no de los profesores, ni de tus papás”
Así, Ana Carolina Rodríguez, académica del Departamento de Psiquiatría de Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNAM, en el área de investigación, explicó que algunos jóvenes tienen erróneamente aprendidas de que la agresividad es el camino correcto para el éxito y los refuerzan con el apoyo de su grupo social
“los pares que están ahí observando, están reforzando, se están riendo, están aplaudiendo, es un fenómeno social, no es de uno contra uno, instrumentando la agresividad como un método, para resolver y relacionarse con los otros. Eso es lo que hay que atacar, la víctima, muy vulnerable, el cual hay que darle ciertas herramientas”
Finalmente, la doctora Ana Carolina Rodríguez, académica del Departamento de Psiquiatría de Salud Mental de la Facultad de Medicina de la UNAM, explicó que además de las agresiones físicas o verbales entre pares, existe el llamado buying es el relacional, las exclusiones, las humillaciones en público, hacer la ley del hielo por ejemplo, en preparatoria, ya no se observa tanta violencia física o verbal, modifican el método y las agresiones son casi invisibles, a través de internet o redes sociales
“Primaria, vamos a ver cuestiones orientadas a los aspecto físicos, lentes, peso, la altura, todo lo que físicamente nos hace evidentemente distintos, eso se va ir sofisticando conforme van avanzado los grados, en la preparatoria, difícilmente se van a molestar por los lentes, por el peso, entonces a lo mejor las calificaciones”
