El Ejército de Ucrania ha empezado a recuperar localidades de Lugansk, en el este de ese país, que desde hace meses permanecía tomada casi en su totalidad por las tropas rusas. También se informa que ha recuperado más de 400 kilómetros cuadrados de territorio en Jersón.   

Se trata de dos de las regiones que, junto con Donetsk y Zaporiyia, Rusia se anexionó recientemente de manera ilegal.   

En respuesta, Rusia ha creado nuevas líneas defensivas para tratar de frenar el avance ucraniano, que ha causado alarma entre las tropas prorrusas, que comenzaron la evacuación de las ciudades de Svatove y Kreminna, cerca de la frontera con la región de Donetsk.  

Ucrania también se prepara para un corte del tránsito de gas ruso, pese a que su red de transporte es una de las dos rutas activas mediante las cuales el energético llega a la Unión Europea (UE) y Moldavia.   

Sin embargo, expertos advierten que existe una alta probabilidad de que Rusia pare totalmente las exportaciones a través de territorio ucraniano, ya que de acuerdo con el contrato firmado entre ambas naciones, el gobierno ruso está obligado a pagar por la cantidad mínima fija de tránsito de gas, es decir, 109 millones de metros cúbicos al día, lo exporte o no lo exporte.