El presidente de Perú, Pedro Castillo Terrones, disolvió el Congreso de su país y anunció la conformación de un gobierno de emergencia.
La noticia se dio a conocer poco antes de que el Legislativo debatiera una moción para su posible destitución por permanente incapacidad moral, la tercera en lo que va del año y medio de su gestión.
Y es que la Fiscalía peruana tiene seis casos preliminares contra el presidente Castillo por presunta corrupción, bajo la hipótesis de que usó su poder para lucrar a cambio del otorgamiento de obras públicas.
En un mensaje televisado a la nación, Pedro Castillo informó que a la brevedad posible se convocará a elecciones para un nuevo Congreso con facultades constituyentes, el cual deberá elaborar una nueva Constitución en un plazo de nueve meses.
En tanto eso ocurra, se gobernará mediante decretos ley y habrá toque de queda nacional a partir de las 22:00 horas y hasta las 04:00 horas, tiempo local.
Asimismo, anunció la reorganización del Poder Judicial, el Ministerio Público, el Tribunal Constitucional y la Junta Nacional de Justicia.
Congresistas acusaron que con esta decisión, el mandatario configuró un golpe de Estado.