Con la aprobación del Programa Nacional de Semillas 2020-2024, se busca incrementar la producción nacional de semilla de calidad de variedades mejoradas para aumentar la productividad y autosuficiencia alimentaria.
Si duda, es “positivo para el sector semillero”, y un acierto de la Secretaría de Agricultura, ya que se complementa con el Sistema Nacional de Semillas publicado hace 4 años, explicó en entrevista Mario Puente, director de la Asociación Mexicana de Semilleros.
Ahora, dijo, se requiere de la Política Nacional de Semillas, para contar con un paquete de tres instrumentos de política pública que “nos ayuden a tener certidumbre tanto jurídica como normativa para invertir en investigación y desarrollo en las semillas en México y alcanzar la seguridad alimentaria”.
Dicha Política Nacional “establece líneas, objetivos y acciones bien definidas para la producción de semillas a mediano y largo plazo para poder garantizar el abasto de semillas de calidad en México y contribuir a la autosuficiencia alimentaria”.
Con el Programa Nacional se fortalecen los programas y acciones orientados al bienestar de la población rural, a través de la vigencia de los mandatos legales para mejoramiento, producción, certificación y comercio de semillas.
El líder de los semilleros, explicó que en materia social y económica, el sector semillero en México genera 100 mil empleos directos, 300 mil empleos indirectos y beneficia a 10 millones de agricultores y ganaderos mexicanos.
Y de acuerdo con el SNICS (2018), la superficie inscrita para la producción de semillas en México fue de 64,729 hectáreas, con una producción de 212,283 toneladas de
semillas calificadas.
