Cerca de 200 jóvenes fueron desalojados de una fiesta clandestina que se registró en el municipio de Ecatepec, Estado de México, como medida para evitar la propagación del COVID 19.
Dicha fiesta se celebraba en el estacionamiento del Fraccionamiento Croc Aragón, donde habían colocado una manta y se vendían bebidas alcohólicas a los asistentes. Al notar la presencia policiaca, muchos jóvenes tiraron latas y las bebidas embriagantes, para tratar de disuadir a los funcionarios públicos y poder continuar con el convivio.
Al platicar con uno de los organizadores del evento, aseguró que se trataba de una fiesta familiar de cumpleaños, sin embargo, se les dijo que no podían realizar este tipo de reuniones, por lo que poco a poco los jóvenes salieron del lugar para retirarse a su domicilios.
