Es necesario garantizar una menstruación digna en las 216 mil 244 escuelas de educación básica y media superior del país, se requiere una legislación que garantice educación, infraestructura e insumos gratuitos, pero solo 15 entidades federativas que cuentan con leyes de educación que incluyen el tema de menstruación y solo Sonora considera los 3 aspectos
“El 43% de las estudiantes preferiría no ir a la escuela durante sus periodos menstruales, el 20% se ha ausentado por lo menos una vez por este motivo y el 30% ha tenido que improvisar con papel de baño, ante la falta de toallas sanitarias u otros productos de gestión”
De acuerdo con Jeny Farías, directora de proyectos de la ONG Mexicanos Primero, en México, los datos respecto a la pobreza menstrual son preocupantes y casi tres de cada 4 estudiantes no cuentan con jabón para lavarse las manos.
¿Cuáles son las principales carencias en la infraestructura escolar e impide la adecuada gestión de la menstruación?
Por ejemplo, dos de cada diez escuelas no tienen agua potable, explicó Jeny Farías, directora de proyectos de la ONG Mexicanos Primero
“El 23% de escuelas no cuenta con servicio de agua, 2.5% que son cerca de 6 mil escuelas no tiene baños, resulta evidente la desventaja en la que se encuentran las niñas y adolescentes cuando la gestión de sus menstruaciones no es la adecuada”
Otro dato de la carencia de infraestructura en escuelas lo destaca Laura Ramírez, directora de Fortalecimiento de Comunidades Educativas en Mexicanos Primero
“El 18.3% de escuelas no tienen lava manos, 2.5% de escuelas, no dispone de servicios sanitarios, estamos hablando que hay un impacto grande de la infraestructura, lo mínimo de la gestión menstrual: la higiene”
La falta de agua y sanitarios en primarias y secundarias se agudiza en zonas rurales e indígenas del país habla Laura Ramírez, directora de Fortalecimiento de Comunidades Educativas en Mexicanos Primero
“Según Mejoredu, el 23.6% de las escuelas y planteles no tienen agua potable, estamos hablando de más de 56 mil escuelas del país, en las primarias indígenas y comunitarias, 44.7%, casi la mitad de las escuelas indígenas y comunitarias no tienen agua potable
Y en telesecundaria o bachilleratos en zonas alejadas se agudiza la falta de infraestructura escolar dijo Laura Ramírez, directora de Fortalecimiento de Comunidades Educativas en Mexicanos Primero
“Telesecundarias y secundarias comunitarias un 27.3 y 63.7% no tienen agua potable y en media superior lo planteles estatales un 35.5% no tienen agua potable”
¿Cuáles son los estigmas, burlas y otras actitudes derivadas de la falta de conocimiento, que ocasiona que las estudiantes no estén en la escuela, durante su periodo menstrual?
De acuerdo con Laura Ramírez, directora de Fortalecimiento de Comunidades Educativas en Mexicanos Primero, las estudiantes no pueden concentrarse en su aprendizaje o incluso abandonan las aulas, por la presión e incomodidad que les genera la menstruación
“Creencias relacionadas con la menstruación, siendo algo natural, la ponen como si fuera algo sucio o vergonzoso, burlas. El 46% de las jóvenes de secundaria en CDMX han escuchado bromas o burlas sobre la menstruación de parte compañeros y docentes. En broma, sí puede tener algo muy negativo, emocional”
Finalmente, uno de los mayores temores de las niñas y jóvenes que están en su periodo, es ensuciar su ropa
“La pobreza menstrual tiene un impacto negativo en el derecho a aprender, las niñas dejan de asistir a la escuela o asisten pero no la aprovechan plenamente, porque no cuentan con toallas sanitarias por el miedo a manchar su ropa, no hay baños o puertas o lavamanos, creencias que vienen de la reproducción de estereotipos negativos de género, porque la menstruación es sucia o vergonzosa”
¿En qué consiste el Manual: “Menstruar en la Escuela, Manual de Acción para Docentes y Personal Directivo”: Mexicanos Primero y Fundación Femmex?
El manual incluye tres componentes básicos de la menstruación digna en el ámbito escolar: la educación sobre la gestión menstrual, los insumos y la infraestructura.
El primero se enfoca en la educación, proporciona información oportuna, clara y sin tabúes que tiene el objetivo de derribar prejuicios y fomentar decisiones informadas para la gestión de una menstruación digna.
El segundo brinda información sobre productos menstruales y promueve su disponibilidad en las escuelas para las estudiantes y las maestras, y el tercero ayuda a las y los maestros a evaluar el estado de la infraestructura y servicios en las escuelas y les ofrece acciones para que ellas y ellos logren dignificarlas.
Forma parte de una estrategia que busca incidir en la legislación correspondiente y lograr acciones concretas en los espacios escolares mediante un trabajo colaborativo con autoridades de los distintos niveles de gobierno, participación de la sociedad civil organizada y sobre todo de las comunidades escolares.