La pasada consulta indígena sobre el “Proyecto de desarrollo Tren Maya” no cumplió en su totalidad con los estándares internacionales en la materia.
Así lo consideró la Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, luego de que su personal asistiera en calidad de observadores a 4 de las 15 asambleas regionales informativas y en 8 de las 15 asambleas consultivas celebradas entre el 15 de noviembre y el 15 de diciembre.
La ONU-DH detalló que desde el inicio las convocatorias a estas reuniones hacían referencia a la realización del proyecto y sus beneficios, pero no hacían referencia a los impactos negativos que pudiera tener la obra en su paso por cinco estados del sureste.
Agregaron que la ausencia de estudios sobre los impactos o la falta de difusión de los mismos, dificulta que las personas puedan definir su posición frente al proyecto.
