Tras lamentar los hechos de violencia ocurridos en Coatzacoalcos, Veracruz, el subsecretario de Gobernación, Ricardo Peralta, reconoció que es imposible que en ocho meses de gobierno se pueda resolver la “herencia maldita” de la inseguridad, que es producto de la falta de intervención de otras administraciones para que no se rompiera el tejido social.
“En ochos meses de gobierno, no solamente no es posible resolver una herencia maldita como es la inseguridad, todos la sufrimos como ciudadanos, sin embargo hoy más que nunca se está atendiendo a los jóvenes, se están atendiendo todas las formas donde exista la posibilidad de desarrollar a las comunidades, y pues todos deseamos que no vuelvan a ocurrir estos hechos”.
Luego de participar en la Reunión Plenaria del Grupo Parlamentario del PT, el funcionario federal no consideró posible que la Secretaría de Gobernación pudiera intervenir, para superar las diferencias entre el gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, y el fiscal del estado Jorge Winckler, toda vez que este asunto corresponde al estado.
