En punto de las 11 de la noche, el presidente de México llevó a cabo el Grito de Independencia desde el balcón de Palacio Nacional.
Acompañado de su esposa, nuevamente modificó la tradicional arenga que recuerda a los protagonistas de la gesta heroica, en esta ocasión agregó vivas al amor, los hermanos migrantes y los pueblos indígenas.
Además reiteró el grito de “muera la corrupción, la avaricia, el racismo y la discriminación”, acción que generó confusión entre los asistentes, quienes no sabían si gritar viva o muera.
¡Mexicanas! ¡Mexicanos!:
¡Viva la Independencia!
¡Viva Miguel Hidalgo y Costilla!
¡Viva Josefa Ortiz de Domínguez!
¡Viva Ignacio Allende!
¡Viva Leona Vicario!
¡Viva José María Morelos y Pavón!
¡Viva Vicente Guerrero!
¡Vivan los héroes anónimos!
¡Viva la libertad!
¡Viva la igualdad!
¡Viva la justicia!
¡Viva la democracia!
¡Viva nuestra soberanía!
¡Viva la fraternidad universal!
¡Mexicanas! ¡Mexicanos!
¡Que muera la corrupción!
¡Que muera la avaricia!
¡Que muera el racismo!
¡Que muera la discriminación!
¡Que viva el amor!
¡Que vivan nuestros hermanos migrantes!
¡Vivan los pueblos indígenas!
¡Viva la grandeza cultural de México!
¡Viva México!
¡Viva México!
¡Viva México!
Posteriormente, el presidente de la República ondeó la bandera y tocó la campana de Dolores, para después observar los fuegos artificiales que acompañaban un popurrí de música mexicana.
El primer mandatario observó atento en todo momento el espectáculo multicolor, mientras que su esposa sonreía y seguía el ritmo de la música.
