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Al presentar su informe de labores 2019, la presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Rosario Piedra Ibarra, afirmó que el fracaso de este organismo ha sido uno de los más costosos y afrentosos para los mexicanos, porque su dispendiosa figura burocrática, la más onerosa de América Latina, ha obtenido los resultados más pobres. Por ello, dijo ha iniciado un proceso de reestructuración en su operación, atención y resolución de quejas así como en la eliminación de gastos innecesarios y retabulación de salarios.
Ante el Pleno de la Comisión Permanente, en San Lázaro destacó que “de enero 2015 a junio de 2019, la Comisión gastó más de 8 millones de pesos en comidas, reuniones y 537 viajes, 82 de ellos al extranjero y que en ese mismo periodo se otorgaron a la oficina de la presidencia viáticos por un millón 929 mil 490 pesos, esto no va a volver a pasar”.
Por ello, concluyó “que el fracaso de la CNDH ha sido uno de los más costosos y afrentosos para los mexicanos porque su dispendiosas figura burocrática no ha respondido a las necesidades y expectativas ciudadanas, no se ha conducido con trasparencia. Un escaparate para consumo del extranjero, para dar una imagen de derechos humanos favorable al gobierno pero no más que una pantalla”.
Dijo que desde su concepción en los gobiernos neoliberales, su operación fue diseñada “con fines cosméticos para administrar los problemas de los gobiernos en turno para esconder los abusos de poder y poner en la congeladora conflictos de que no eran del interés de los gobernantes o que les eran incómodos”.
