Al presentar su ranking mundial de las ciudades más violentas del mundo, el presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal, José Antonio Ortega, detalla que por séptimo año consecutivo una ciudad mexicana es la más violenta del mundo, y en el 2023 ese lugar correspondió a Colima con 140.3 homicidios por cada cien mil habitantes, seguida de Ciudad Obregón, Sonora; Puerto Príncipe en Haití, y Zamora, Michoacán: mientras que Manzanillo, Tijuana y Zacatecas les siguen de cerca.
Para José Antonio Ortega, la estrategia “de abrazos a los delincuentes y balazos a la ciudadanía” que promueve el gobierno federal, ha sido un rotundo fracaso.
“Abrazos no balazos ya tiene más de cinco años, y lo que vemos es: 16 de las 50 ciudades más violetas del mundo, dentro de este horroroso ranking, del que no quisiéramos que nuestras ciudades mexicanas estuvieran”.
El presidente del Consejo Ciudadano, criticó que el gobierno federal maquille las cifras para generar la percepción de menor violencia y menos homicidios en el país; al tiempo que recordó al gobierno federal que sí se puede reducir la violencia, pero con verdaderas acciones de combate al crimen, como son “es el castigo, es abatir la impunidad, es investigar, judicializar y sentenciar a los homicidas, y a los otros delitos que se vienen cometiendo”.
Para José Antonio Ortega, el actual momento es crucial para exigir a los actuales y futuros candidatos a cargos de elección popular, que expliquen cómo van a combatir la violencia en el país.
“La exigencia a los candidatos de todos los partidos, que digan, qué van a hacer con la violencia, con los homicidios dolosos, con el cobro de piso, con los robos con violencia en carreteras, con los secuestros. ¿Qué van a hacer eso que nos está agobiando?”
Por su parte, Leonardo García Camarena, Presidente de Misión Rescate México, consideró que todo este clima de violencia tiene su origen en el gran nivel de impunidad que tiene los delincuentes,
“Necesitamos que el gobierno haga algo, necesitamos que el gobierno no se voltee para otro lado, que estas ejecuciones de candidatos o de funcionarios de gobierno, aún cuando no empiezan las campañas se van a multiplicar, y más vale que estemos preparados para un escenario de esa naturaleza. No podemos seguir escogiendo, de todos los niveles, autoridades que hagan caso omiso a esta realidad”.
Finalmente, José Antonio Ortega, presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal, advirtió que si las cosas no cambian para mejorar, nuestro país va camino a convertirse en un Estado fallido, tal como ocurre en Ecuador y Haití.
