El ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Zaldivar convocó a las autoridades de gobierno, educativas y la sociedad civil a hacer un frente común en contra de los feminicidas, ya que para avanzar hacia un país con seguridad, justicia y paz se debe cambiar la cultura machista y acabar con la impunidad.
“En México matan a 10 mujeres al día, estamos en un país donde las mujeres y las niñas las desaparecen y las matan con total impunidad mientras la sociedad y las autoridades volteamos a otro lado, esta es una realidad que no podemos seguir permitiendo”.
En la firma de un convenio entre la SCJN con el Centro de Documentación, Investigación y Prospectiva para la Seguridad, Justicia y Paz de la ANUIES, el ministro Zaldivar llamó a las universidades a cambiar esta cultura machista que se manifiesta.
“Cuando se tienen ambientes donde permitimos que maestros, alumnos acosen a las alumnas; cuando no establecemos políticas de cero tolerancia al lenguaje, a los chistes, a las miradas y al multi acoso que sufren todas las mujeres que acuden a los centros de educación; cuando incluso premiamos a maestros que sabemos que por años tienen fama de ser acosadores, y cuando quitamos de inmediato el tablero donde ponen las mujeres los nombres de los profesores que las acosan para tratar de disimular que en esa universidad no pasa nada”, detalló el ministro presidente.
Por ello, dijo, “las universidades tiene una responsabilidad de un cambio de cultura y este centro me parece que si quiere tomarse en serio la seguridad, la justicia y la paz, requiere programas urgentes y profundos para coadyuvar a este cambio de cultura”.
“Nada justifica que maten a las mujeres y a las niñas”, afirmó Zaldivar. “Por qué los hombres matan mujeres todos los días, porque pueden y no pasa nada, porque no hay consecuencias.
Los feminicidios no se investigan y cuando se investigan se hace mal, y por regla general las carpetas en las fiscalías no se arman adecuadamente y de ahí viene la impunidad en las resoluciones, y los asuntos que se judicializan son una minoría, casi insignificante, destacó.
