Ya hay conflictos hídricos que son conflictos por el control del agua
El nivel del sistema Cutzamala se verá comprometido en la próxima temporada de calor.
La profesora e investigadora de la UAM Abigail Martínez Mendoza, dijo que el 63% que ha alcanzado el Cutzamala, no será suficiente para cumplir la demanda que actualmente satisface. Cabe recordar que el Cutzamala sólo abastece una parte del Estado de México y la CDMX.
De hecho la pregunta que se hace, es:
¿Y qué están haciendo los gobiernos al respecto? Porque el hecho de que las personas pongan una cubeta en la regadera, o que se laven los dientes en sólo un minuto, son acciones que finalmente se recargan en la sociedad, pero ¿Y las autoridades?
Si a estas alturas ya se hubiera echado a andar el Programa Nacional Contra las Sequías que existe, se llama PRONACOSE, entonces ya se estaría captando agua de lluvia en enormes volúmenes pero además ya se estaría capturando la neblina que de todas maneras es agua…
La estrategia dice, de traer agua desde lejos, como lo que ocurre con el sistema Cutzamala, ya es “precaria”, porque en la ruta para abastecer alcaldías de la ciudad y municipios del estado de México, se pierde más del 40% del agua por las fugas, entonces la alternativa ya, es la captación de agua de lluvia, por ejemplo en techos de edificios y de centros comerciales o de lugares con grandes dimensiones, pero también el uso de los actuales pozos aunque para eso también se necesita invertir como lo explica la doctora Martínez: “Esta estrategia de recargar al acuífero implica volver a los ríos rescatar los ríos de la ciudad rescatar las microcuencas que se encuentran en la misma ciudad voltear a ver los techos por ejemplo los techos de los centros comerciales y luego implica entonces también tener dos sistemas de drenaje”.
Apenas hace unas semanas se dio a conocer que como una estrategia para combatir la escasez de agua habrá una reducción del 50% en la extracción de líquido del Cutzamala, pero ello traerá sí o sí otras implicaciones para las cuales habrá que prepararse aunque no se prevé que el Sistema se quede en ceros, sin agua: “Sin agua al 100 % lo dudo, pero sí iniciaría un programa muy intenso de tandeo, eso sí lo veo muy factible, un sistema de tandeo muy estricto que evidentemente la ciudadanía lo va a resentir”.
Aquí la cuestión es que cada cambio de administración, se cambian los programas o las políticas públicas y por eso la propuesta de la doctora es que independientemente del partido político que gobierne, es que se firme un gran acuerdo para elaborar una estrategia a largo plazo de manera que gobierne quien gobierne se continúe ese proceso sin interrupciones. Es más, ya hay un ejemplo de que sí se puede vivir con agua de lluvia: “Lupitas casas viejas, en el municipio de Lerma, tiene 40 años viviendo de la captación de agua de lluvia donde ojo, con una cisterna les alcanza por lo menos entre cuatro y 5 meses, una cisterna que se llena por lluvia, bien cuidada”.
Ahora ¿Qué puede pasar si ante todas las propuestas, todas las investigaciones como la de la doctora Abigail Martínez Mendoza, no se hace nada?
“Fíjate que hicimos un sondeo de conflictos hídricos aquí en el estado de México y ¿sabes cuántos detecté? 21 conflictos hídricos. Un conflicto hídrico es la disputa entre usuarios o usuarios y algún nivel de gobierno o alguna institución por la disponibilidad de agua en las viviendas”.
Redondeando… La alternativa es dejar de traer agua de lejos e ir pensando en la captación de agua de lluvia aunque ello representa un costo, de acuerdo con la propuesta: “Recolección y Saneamiento de Lluvia en la Lupita, Lerma”, el costo por vivienda para captar agua de lluvia va de los 6 mil 500 a los 7 mil pesos, pero esta acción que debería ser de gobierno, permitiría:
- La recarga de los mantos acuíferos
- La recarga de las presas del sistema Cutzamala
- La reparación de las innumerables fugas en los ductos que transportan agua
- La escasez del líquido
Todo ello implica trabajo de los niveles de gobierno, de la iniciativa privada y de los ciudadanos.
Por cierto, de acuerdo con diversas investigaciones, el bosque de Chapultepec es una excelente alternativa para recargar los mantos acuíferos de la ciudad de México, de lo que se trata es de rediseñar las cuencas que están en la ciudad de México.