Después del asesinato del alcalde de Chilpancingo, Guerrero, Alejandro Arcos, la tarde del domingo, el líder nacional del PAN, Marko Cortés, urgió al gobierno federal a cambiar la estrategia de seguridad, pues argumentó que es una muestra de que fracasó el “abrazos no balazos”.
El presidente de Acción Nacional afirmó que el plan en materia de seguridad de la 4T solo ha permitido la expansión del control de las organizaciones criminales y cárteles del narcotráfico. Hay un incremento de varios delitos como el secuestro y la extorsión en el país, detalló.
Al respecto, dijo que el gobierno mexicano ha sido rebasado por el crimen organizado, como ocurrió en Chilpancingo por lo que se necesitan otro tipo de medidas que modifiquen el rumbo de la seguridad en el país y combatan a los grupos delictivos.
En particular, insistió en tipificar el delito de narcoterrorismo, una propuesta que ha promovido en las últimas semanas para buscar cooperación internacional en materia de seguridad en México, la cual ha sido criticada por incitar una posible injerencia en el país.
Calificó como un acto de terrorismo el asesinato del alcalde de Chilpancingo, debido a que dejaron su cuerpo decapitado a plena luz del día, a solo unos días de haber rendido protesta en dicho cargo público.