Con las luces del recinto apagado y los focos alumbrando el centro de la pista, dos bailarines de danza recrearon un partido de tenis con una pelota imaginaria y unos pasos de ballet al compás de la música clásica.
Su espectáculo dio paso a unos minutos de percusión antes de que saltasen a la pista central, uno a uno y pasando al lado del trofeo de la ‘ensaladera’, los dieciocho equipos.
Los equipos más aplaudidos fueron la vigente campeona, Croacia, y España, que en su condición de anfitriona se llevó todos los flashes de los teléfonos móviles del público.
La ceremonia concluyó con la música del puertorriqueño Farruko y el dj Alan Walker, que hicieron bailar a los espectadores que acudieron y que apenas supusieron media entrada del aforo del recinto.