El Inter se impuso por marcador de 2-0 al Milán en el “clásico de la Madoninna” dentro de la ida de semifinales de la Liga de Campeones de Europa que se disputó en el estadio San Siro.
El bosnio Edin Dzeko se encargó de abrir el marcador al minuto 8, mientras que Henrij Mjitarián se encargó de cerrar la cuenta al 11.
Con este resultado el cuadro “neroazurri” necesita del empate, de la victoria o inclusive se pueden dar el lujo de perder por diferencia de un tanto.
Mientras que los “rossoneros” están obligados al menos a ganar por diferencia de dos tantos para obligar al alargue o en su caso ganar por 3 para avanzar a la definición por el título.
Los dirigidos por Simone Inzaghi prácticamente definieron el juego en los primeros 25 minutos en los que fueron muy superiores a su rival, algo que logró reflejar en el marcador.
Apenas al minuto 8 un tiro de esquina fue rematado de manera acrobática por Dzeko para abrir el marcador y adquirir una ventaja que lo hizo sentirse todavía más cómodo en la cancha.
Los locales administrativos no tuvieron capacidad de reacción, lo que aprovechó su rival para poner la segunda anotación en un centro al área que el argentino Lautaro Martínez dejó pasar para que Mjitarián y definir de manera correcta.
El Inter pudo alcanzar una tercera anotación, pero la madera rechazó un disparo del turco Hakan Calhanoglu, además que el VAR echó para atrás un supuesto penal sobre Lautaro, para irse así al descanso.
Para el complemento los de Stefeno Pioli tuvieron un mejor accionar, motivado también porque un Inter que les cedió la iniciativa, pero no el control del juego, con lo que en ningún momento vio en peligro su ventaja, para salir así con el triunfo que lo pone con un pie en la final.
Por Ricardo Blancas Avalos e imagen de m.iacobucci.tiscali.it/Depositphotos.com
