El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), alertó que más de 230 millones de niñas y mujeres en todo el mundo, son sobrevivientes de la mutilación genital, una cifra que aumentó un 15 por ciento, desde la última estimación en 2016.
De acuerdo con el informe, la mutilación genital femenina puede incluir la remoción total o parcial del clítoris, así como de los labios menores, y también la sutura de la apertura vaginal para estrecharla.
Además de ser el origen de hemorragias e infecciones fatales, puede tener consecuencias a largo plazo como problemas de fertilidad, complicaciones para dar a luz, bebés que nacen muertos o relaciones sexuales dolorosas.
El incremento global es provocado en gran medida por el crecimiento de la población en ciertos países, pero el informe destaca el progreso en la reducción de su prevalencia en otros lugares como Sierra Leona, Etiopía, Burkina Faso y Kenia.
En Somalia, 99 por ciento de las mujeres entre 15 y 49 años fueron sometidas a la mutilación genital, así como 95 por ciento en Guinea, 90 por ciento en Yibuti y 89 por ciento en Malí.
