Un día después de que la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) levantó su plantón, que se extendió por 23 días, todo regresó a la normalidad en el Zócalo del Centro Histórico de la Ciudad de México.
Este domingo, la plancha ya no lució tapizada de lonas y tiendas de campaña, sino de familias y turistas que posaron para la selfie frente al asta bandera, niños jugando en sus patines o con su pelota, danzantes prehispánicos y el tradicional ambulantaje.
No obstante, personal de Limpieza Urbana del gobierno capitalino, aún no terminaba de recoger toda la basura.
Brisia aprovechó el último día de vacaciones de sus dos hijos recorriendo las tiendas del Centro. Al llegar al Zócalo les compró un avión de unicel que estuvieron lanzando por varios minutos.
Señaló que si bien está de acuerdo con la libre manifestación, no así a la afectación a trabajadores de la zona:
“Aprovechamos para pasar aquí, ahorita que está vacío. (La plaza) Se ve limpia, agradable para los niños y para los turistas, para todos los que transitamos por aquí”
“Se vale que se manifiesten, pero que no que dejen feo y una mala apariencia”, dijo en entrevista para 88.9 Noticias.
Un alivio para los negocios
Sin duda uno de los mayores iconos de la capital es la música de los organilleros, quienes fueron de los que más sufrieron por la disminución de transeúntes durante el plantón.
Estela lleva ocho años ayudando a pedir propina, mientras su esposo ejecuta el instrumento, en la esquina entre las calles Francisco I. Madero y Palma. Su horario es de 11:00 a 20:00 horas, pero las últimas tres semanas fue difícil sacar 100 pesos al día.
“Nos fue mal, porque ya no venía mucha gente a pasear, solo estaban los maestros y vendedores […] La verdad esos días nos llevábamos menos de 100 pesos, porque nomás no. Que se hayan ido está bien, porque hay más turistas”, expuso.
Mientras que los empleados de las grandes tiendas también la padecieron. Santiago, que trabaja en una tienda de ropa para caballero en calle 5 de Mayo, aseguró que en dicho lapso las ventas disminuyeron hasta 40 por ciento, lo que provocó que no pudieran comisionar
“La verdad (esto significa) un alivio, porque nosotros manejamos un presupuesto de tienda y en base a ello es nuestra ganancia, esperemos que nos vaya mejor este mes, porque no comisionamos como se espera”, agregó.
Cabe mencionar que algunos locales tuvieron que dar servicio sin luz, debido a que los integrantes de la CNTE se colgaban de la electricidad.
De acuerdo con la Cámara de Comercio de la Ciudad de México, las pérdidas por los 23 días de plantón son de al menos 20 mil millones de pesos. Al respecto la bancada del PAN en el Congreso local pidió al Gobierno central lanzar un programa económico emergente para apoyar a los comerciantes del Centro Histórico que se vieron afectados.