Vecinos de la alcaldía Benito Juárez están hartos de que las autoridades politicen el problema de agua contaminada

(Foto: X/@SeGobCDMX)

Ya son casi dos semanas desde que los vecinos de la alcaldía Benito Juárez bloquearon por primera vez la avenida Insurgentes Sur como protesta por el agua contaminada que se les suministra en sus hogares. Pero hasta la fecha, ni el gobierno de la Ciudad de México ni de la demarcación han hecho públicos los resultados de las muestras que tomaron en cisternas y tinacos.

Si bien las autoridades están apoyando con garrafones de agua potable a los afectados en los parques San Lorenzo, Alfonso Esparza Oteo y Arboledas, esta falta de respuesta sigue causando preocupación entre los vecinos, debido a que no saben los riesgos a la salud por estar en contacto con dicho líquido. Así nos lo externó Emilio, quien vive en la colonia Nápoles y apoya la iniciativa de entablar una demanda colectiva contras quienes resulten responsables de la contaminación:

“Pues el manejo a mí me parece que ha sido pésimo. Durante un mes y hasta la fecha, que no digan exactamente qué es ¿o sea? vamos  […] Yo ya firmé para el tema de la demanda colectiva. Sí es un fastidio”

“Quisieron tapar el sol con un dedo y los vecinos les salieron más listos de lo que están acostumbrados habitualmente”, agregó.

Sin embargo, lejos de trabajar en coordinación en favor de la ciudadanía, el jefe de gobierno capitalino, Martí Batres, y el jefe de despacho de la alcaldía Benito Juárez, Jaime Mata, se han dedicado en responsabilizar al otro de esta crisis.

Incluso, el pasado 19 de abril el Sistema de Aguas de la CDMX denunció ante la Fiscalía local un presunto sabotaje por la contaminación del pozo en el Parque Alfonso XIII, en la alcaldía Álvaro Obregón, al asegurar que está relacionado; mientras que el funcionario panista afirmó que el gobierno central supuestamente utiliza dispersiones y neutralizadores de olor en el suministro con el objetivo de hacer creer a la población que el problema ya se solucionó.

Al respecto, la señora Greta, de 72 años, que también vive en la Nápoles, enfatizó que los vecinos están hartos de que se politice el problema y nada más “se estén echando la bolita”. Dijo que es una falta de respeto priorizar sus intereses electorales que cuidar a la ciudadanía. 

“Mucha gente dice que es un problema político y demás. Perdón, el agua olía y nos estaba afectando a todos […] Yo no soy de ningún partido, pero creo que no se puede jugar con la salud de la gente. De verdad, dan vergüenza”, declaró.

Y es que, en tanto se normaliza el suministro, lo que podría tardar semanas o meses, los habitantes de la Benito Juárez seguirán ingeniándoselas para realizar sus labores domésticas y evitar algún contacto con el agua del suministro hasta que se garantice su uso apto.

Por ejemplo, el señor Mario Gómez, quien vive y administra un edificio de 17 departamentos en la calle Adolfo Prieto en la colonia Del Valle, compartió el acuerdo con los demás inquilinos para racionalizar el agua de las pipas, pues la prioridad es para que se utilice para la preparación de alimentos como para el baño.

“El acuerdo con los vecinos fue que, pues los que tengan familiares fuera de la delegación, ir a lavar y a bañarse, hacer lo indispensable para economizar nuestra agua”, dijo.

Explicó que con estas medidas los 50 mil litros que compraron podría durarles hasta dos semanas.

Según estudio independiente de vecinos, el agua tiene cloroformo y otros químicos

De acuerdo al análisis independiente realizado por los vecinos de la Benito Juárez, se reveló la noche de este domingo a través de su cuenta de X que, en las muestras tomadas el pasado 10 de abril de las colonias Nonoalco, Del Valle y Nápoles, en el agua se evidenció la presencia de cloroformo, diclorobenceno, tricloroetileno y otros compuestos peligrosos en el suministro.

Las muestras fueron realizadas por el laboratorio con número de acreditación No. AG-188-051/11 del 18 de mayo de 2011 y aprobación No. CNA-GCA-2536 vigente hasta 2024-10-24.