Las mafias que controlan la venta de Gas Licuado de Petróleo (LP), en el Estado de México, se han apoderado del municipio de Toluca, así como de Villa Nicolás Romero y de al menos 10 alcaldías más, así lo denuncian organizaciones civiles que han revelado el crecimiento de las llamadas gaseras clandestinas, aseguran; que este fenómeno se registra con la complacencia de las autoridades.
En específico, de Luis Felipe Puente, director de Protección Civil del Edomex en complicidad con el alcalde de Toluca, Juan Rodolfo Sánchez Gómez y de Armando Navarrete López alcalde de Villa Nicolás Romero, “hemos detectado por lo menos 10 gaseras clandestinas que se instalaron durante la pandemia en el municipio de Toluca, solo en ese lugar crecieron de manera considerable gracia a la corrupción”.
“Somos conscientes que esos lugares no se pueden instalar sin el aval de Protección Civil y de los alcaldes, es decir; Luis Felipe Puente t Juan Rodolfo Sánchez están involucrados, sin embargo, el verdadero problema es que no tienen las normas mínimas de seguridad y ponen en riesgo a familias enteras porque las dejaron instalarse en zonas conservadas”, explicó Roque Casto, integrante de la asociación civil, “Cero Corrupción”.
El inconforme denuncia que muestra de la presunta corrupción entre funcionario y las gaseras clandestinas, fue la instalación reciente de la que se encuentra sobre la avenida Independencia en el cruce con la primera cerrada de independencia de la colonia Calixtlahuaca, en Toluca. El local fue clausurado apenas en marzo pasado y 15 días después, se volvió a abrir y a pesar de las denuncias e inconformidades de los vecinos, sigue operando.
Por otro lado, los gaseros establecidos de manera correcta, denuncian que el GAS L.P. que venden esas empresas ilegales, es robado, “pedimos la intervención directa de las autoridades federales, de la Guardia Nacional e incluso, que el presidente Andrés Manuel López Obrador, voltee y se dé cuenta del nivel de corrupción y el peligro que se vive en todo el Estado de México”.
