Para mantener la tranquilidad de los pobladores afectados por el desbordamiento del Río San Juan, en Tequisquiapan, Querétaro, la Guardia Nacional intensifica los patrullajes, día y noche, para evitar posibles actos de pillaje en las casas que fueron dañadas por las recientes inundaciones.
En coordinación con las policías estatales y municipales, los guardias nacionales también recorren las calles a pie tierra para prevenir actos de rapiña en viviendas que permanecen solas debido al daño causado por el agua que las inundó.
Asimismo, el personal de la Guardia Nacional, junto con el Ejército Mexicano, autoridades municipales y de protección civil del estado, continúa rellenando costales de arena para colocar barricadas con el fin de detener el agua y que ésta se canalice a lugares donde no causen afectaciones a la población ni a sus viviendas.
A bordo de lanchas inflables, los guardias nacionales también auxilian a los pobladores a trasladarse de un lugar a otro.