Panamá contará con un “cementerio humanitario”.
Se trata del espacio en donde serán enterrados los migrantes irregulares fallecidos en la selva del Darién, una peligrosa zona fronteriza con Colombia que es utilizada como ruta hacia los Estados Unidos.
El camposanto se construirá por la cantidad de migrantes que han fallecido, dijo José Vicente Pachar, director del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses.
En los últimos cinco años se han registrado 50 migrantes fallecidos tratando de cruzar el Darién, pero la cifra puede ser mayor por lo inaccesible del terreno, falta de denuncias y el abandono de los cuerpos, que ocasiones terminan siendo pasto de los animales.
El “cementerio humanitario”, se ubicará en La Palma, capital de la provincia de Darién, donde “de manera individual se van conservando los restos de las personas con todos los elementos científicos de identificación” para que “si viene algún familiar se puedan hacer los cotejos y entregarlos respetando todos los principios de derechos humanos”, añadió el funcionario.
