Mariann Edgar Budde, la obispa de la Diócesis Episcopal de Washington DC, se negó a ofrecer una disculpa tras pedir al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tener piedad para migrantes ilegales y personas integrantes de la comunidad LGBTIQ+.
Cabe recordar que el pasado martes 21 de enero, un día después de que Donald Trump fuera investido como el presidente número 47 de Estados Unidos, durante un servicio religioso en la Catedral Nacional de Washington, la obispa le pidió de forma directa al mandatario que tuviera clemencia para quienes viven con miedo.
El sermón resultó bastante incómodo para el presidente, quien mediante su red social Truth Social, calificó a la reverenda como “una odiadora de línea dura de la izquierda radical”, y además le exigió que se disculpara con el público.
No obstante, mediante diversas entrevistas en medios de comunicación, la obispa Mariann Budde de 65 años, hizo caso omiso a las críticas hacia su persona, y negó haberle faltado el respeto a Trump, por lo que afirmó que no cree necesario pedir perdón por hacer una súplica, ya que fue la palabra que Dios le dio para ofrecer al pueblo y al presidente.
