De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, cada año se registran cerca de dos millones de accidentes punzocortantes entre los trabajadores de la salud. El personal de enfermería es el más vulnerable en las áreas de urgencias, terapia intensiva y quirófanos, que inclusive se pueden contagiar con hepatitis B y C, y VIH.
Ante esto, en la Ciudad de México se realizó la Cumbre Latinoamericana en Terapia Vascular. Allí participó la doctora Roxana Trejo, gerente de epidemiología y control de infecciones del Centro Médico ABC, quien explicó en entrevista para 88.9 Noticias: “Debería ir de la mano con el desarrollo de competencias y el ir cambiando la forma de ver las cosas, que nosotros identifiquemos y evaluemos el riesgo todo el tiempo y basado en ese riesgo, qué barreras de protección debo utilizar, ya sea protección facial, el tapabocas, un respirador. Creo que un punto importante es que esto se trabaje desde las universidades”.
También participó la Maestra Martha Huertas, subdirectora de Enfermería Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, enfatizó los riesgos que corre el personal de salud.
“En algunas instituciones el personal de enfermería es una de las categorías afectadas por punciones accidentales, pero también otras como las del área médica en formación, es decir médicas y médicos de pregrado. En algunas situaciones puede deberse a la falta de competencias, pero en otras circunstancias puede ser por la utilización de insumos inseguros”, advirtió la Maestra Huertas.
