México se ubica como el segundo país en Latino América con el mayor número de consumidores en la industria de la belleza y del embellecimiento físico, con un valor de 36 mil millones de pesos al año, generando casi 500 mil empleos, en donde 7 de cada 10 son mujeres, sin embargo, los salones de belleza atraviesan un proceso de estancamiento.
Afirmó Lorenzo Valdés, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria del Embellecimiento Físico (Camief), quien agregó que ya se recuperó el 12 por ciento de los establecimientos que cerraron durante la pandemia, sin embargo, distintos problemas como la falta de liquidez, el cambio generacional, entre otros, provocan el cierre de algunos salones de belleza.
“Si hablamos de mortalidad de los primeros años estamos hablando que el 70% no pasan los tres años de vida, esto viene siendo un problema Pyme, un problema que también está afectando mucho el sector, podemos mencionar la falta de liquidez también las altas tasas ahorita que no permite financiamiento y esto un poquito igual con la informalidad será que no haya transparencia para los bancos para otorgar créditos nos van a informar a laboral que ya la conocemos, y las malas prácticas que finalmente esto genera desconfianza en los establecimientos pesimismo y como sabemos que una nota negativa pues termina restando lo bien que está trabajando la industria”.
Ante esto, se busca que profesionalizar al sector ante un consumidor más exigente, más selectivo por la calidad y el servicio personalizado, por lo que se busca crear el distintivo “EC” que será entregado a aquellos establecimientos que demuestren que cumplen con la Norma Mexicana relacionada con este sector.
