La piratería en nuestro país opera como un fenómeno sistemático, sostenido por una alta tolerancia social, fuertes incentivos económicos, y una estructura institucional que, aunque robusta en el papel, resulta lenta y fragmentada en la práctica, afirmó la American Chamber of Commerce (AMCHAM) Mexico.
Quien al presentar los resultados de su Séptimo sondeo de Piratería 2026, aplicado a empresas, revela que la piratería tiene un alta demanda ciudadana, motivada por el diferencial de precios y la normalización social, como lo explicó Guido Lara, Ceo de la agencia de investigación de mercado Lexia.
“Siete de cada 10 empresas consideran que los consumidores no diferencian entre productos originales y piratas, es un problemón no, si el consumidor no no detecta que es pirata y que no, pues ya ahí la complejidad de de resolver el problema se agrava”.
Agregó que el 68% de las empresas ha identificado piratería en sectores que están regulados.
“Algo que tenemos que entender es que es un fenómeno transversal, la piratería afecta simultáneamente múltiples sectores y líneas de negocio, siete de cada 10 empresas han identificado piratería en productos de múltiples categorías, la piratería está en todas estas segmentos en medicamentos, en dispositivos médicos, en alimentos y bebidas, cuidado personal, agroquímicos, dispositivos electrónicos, ropa, calzado juguetes, y peluches impresión y escáner, compresoras y bombas escolares”.
Al respecto habla Carlos García presidente de la Cámara de Comercio Americana.
“Enfrentamos juntos este gran reto, pues no solamente combatimos el ilícito, sino también la percepción de que el que consume la piratería, piensa que no es un grave delito, y están gravemente equivocados en esa percepción, en nuestro estudio del 2016 comprobamos que ocho de cada 10 ciudadanos consumen piratería”.
