Caída de confianza en sus gobiernos y corrupción principales desafíos de países de América Latina y Caribe: OCDE

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La región de América Latina y el Caribe tiene un gran potencial de crecimiento pero los gobiernos deben ser más transparentes y responsables sobre todo ante la falta de confianza de la población en sus gobiernos y en las instituciones públicas.

Lo anterior se deprende del estudio del Panorama de las Administraciones Públicas: América Latina y el Caribe 2024, de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE)  y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en donde Elsa Pilichowski directora de Gobernanza Pública del organismo, explicó que las reformas institucionales han permitido que más latinoamericanos ejerzan sus derechos políticos y los procesos electorales han funcionado “razonablemente bien”, pero la confianza en los gobiernos sigue siendo menor que en los países de la OCDE.

“La confianza en el gobierno en la región ascendía a 36% en 2022 cuatro puntos porcentuales menos que antes de la crisis económica mundial de 2008 y se ha estancado en los últimos años, desde luego no estamos defendiendo una confianza ciega y en la sociedad democráticas debe haber espacio para el debate pero aun así se requiere cierto nivel de confianza para llevar a cabo reformas y establecer prioridades con legitimidad”.

Agregó que los jóvenes tienden a tener menos confianza en el gobierno, en 2022 un promedio de la población entre 15 y 29 años de los países de América Latina y el Caribe confiaban en el gobierno frente al 46 por ciento de los mayores de 50 años de edad.

Asimismo agregó que la última encuesta de Gallup, revela que el 75.5 por ciento de la población de la región piensa que la corrupción es prevalente en las administraciones, además de que debe haber una regulación en las donaciones a partidos políticos.

“Asimismo también hay que regular la cuestión de las donaciones anónimas en cuanto a candidatos políticos y partidos políticos, sólo el  55%  de los casos pues permiten la aplicación de las normativas que pueden existir y que son unas cifras que efectivamente pues difieren en los países OCDE con las cifras al 74% y el 58% respectivamente así que la diferencia tampoco es muy grande”.