La disponibilidad de Diésel Ultra Bajo Azufre (DUBA) ha caído de manera constante desde 2018 a 2021, al pasar del 81 al 72.6 por ciento mientras que su distribución es desigual en las regiones del país, por lo que la aplicación de la NOM-044 de la Secretaria del Medio Ambiente, prevista para enero del 2022, se debe posponer hasta el año 2025.
Al dar a conocer los resultados del muestreo sobre la disponibilidad de Diésel Ultra Bajo Azufre (DUBA) a nivel nacional, Miguel Elizalde Lizarraga, presidente Ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), destacó que de acuerdo con un muestra de 380 estaciones de abasto, arrojó que solo 72.6 por ciento tienen el combustible de bajo azufre, el menor porcentaje desde el 2017, cuando la disponibilidad era del 71 por ciento.
“Esperamos que la Semarnat tome la decisión correcta, porque el que va a afectarse va hacer el medio ambiente, si se obliga a una tecnología para la cual no hay combustible el que va afectarse es el ciudadano porque no vamos a lograr reducir emisiones, entonces necesitamos impulsar la reducción de emisiones si por supuesto pero con las condiciones del combustible que se pueda”.
