Con una convocatoria y un reglamento hechos a modo, grupo de poder pretende imponer rector en Chapingo

El pasado viernes 24 de febrero inició el proceso de campaña para elegir rector en la Universidad Autónoma Chapingo. Entre los candidatos contendientes se encuentran Ángel Garduño García quien fuera nombrado rector interino por una asamblea general y ratificado por el Consejo Universitario hasta el 6 de abril y a quien el Consejo Universitario permitió renunciar un día antes de la fecha límite para presentarse como candidato.

Otro candidato es J. Reyes Altamirano Cárdenas quien se presenta con el respaldo de un amplio número de académicos y estudiantes y que a diferencia de Garduño lleva solo dos días de campaña.

Al segundo día de campaña Ángel Garduño García a través de sus consejeros adeptos, entre ellos Adal Eduardo Pérez Sánchez, quien es sobrino del director general del Patronato de Chapingo, Samuel Pérez Nieto y coordinador de la comisión encargada de vigilar el proceso, están proponiendo cancelar la candidatura de J. Reyes Altamirano Cárdenas bajo supuestas faltas a un reglamento hecho a modo para Garduño. Tales faltas son haber distribuido un díptico de propaganda, un “pin” con el apellido del candidato Altamirano y unos rollos de papel “craft” para recibir la propuesta de los estudiantes.

El candidato Garduño, era presidente del Consejo Universitario cuando se aprobaron a la Convocatoria y el Reglamento para la elección y que en una sesión a modo, logró nombrar a un aliado como rector interino de su interinato. En un evidente conflicto de intereses.

Mientras, el Consejo Universitario discute la cancelación de las candidaturas opositoras a Ángel Garduño, la Auditoria Superior de la Federación, publicó los resultados de la Auditoria a la cuenta pública de Chapingo para el año 2021 que concluye que los estados financieros de la universidad “no son razonables, ni confiables.