Tras los hechos violentos protagonizados por normalistas en Palacio Nacional, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, respondieron al presidente de la República que padres y madres de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, Guerrero, “no están manipulados ni por este mismo centro, ni por le Comisión Interamericana de Derechos Humanos”.
En este marco, lamentó que “la protesta de algunos jóvenes haya escalado a acciones que no comparte el el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez“, y explica que la inconformidad de familiares y normalistas, se debe a la “negativa militar a entregar documentos, la ausencia de reuniones” con el presidente de México, y el intento gubernamental de dividir familias.
Por lo anterior, hace un llamado a “restablecer el diálogo respetuoso, supervisado” por instancias internacionales de Derechos Humanos.