En los próximos dos años, se registrarán “brotes recurrentes” de COVID-19 en el continente americano.
Así lo advirtió la Organización Panamericana de la Salud, al llamar a Brasil, segundo país del mundo más afectado por la enfermedad, a aumentar las pruebas diagnósticas.
Además de la “amplia circulación” del virus en México, hay “transmisión generalizada” en Centroamérica, con “alta incidencia” en Panamá y Costa Rica, sobre todo en la frontera con Nicaragua, señaló el organismo.
En Sudamérica, Brasil, Perú y Chile son los más afectados. El Caribe sigue teniendo focos de contagio en la frontera de Haití y República Dominicana, así como en el Escudo Guayanés.
La OPS lamentó que el número de casos se haya triplicado en la región en apenas un mes, pasando de 690 mil a más de dos millones, y llamó a los países a prepararse para adaptarse a “una nueva forma de vida y redefinir nuestro sentido de lo normal”.