El gobierno de Claudia Sheinbaum tendrá que impulsar una reforma fiscal ante el déficit presupuestario, es decir, mayor gasto que ingresos, que enfrenta la administración pública federal para mantener las finanzas públicas sanas en el país.
“El gobierno entrante tiene grandes retos en materia de sostenibilidad fiscal. Esperamos que tenga la apertura para realizar una reforma fiscal de gran calado que reduzca las brechas de desigualdad”.
Así lo expresó Jorge Cano, coordinador del Programa de Gasto Público y Rendición de Cuentas de México Evalúa, en el webinar “Gasto público justo y eficiente: una herramienta para la igualdad, quien detalló la necesidad de mejorar e incrementar la fiscalización, así como la transparencia del gasto y la rendición de cuentas para dirigir los recursos a ramos prioritarios de la administración pública federal.
Realizó una serie de propuestas para una mejor utilización del presupuesto público, entre las que destacan garantizar una partida presupuestal para el sistema de salud de las personas sin seguridad social, además de fortalecer las regulaciones de adecuaciones presupuestarias.
En este último punto, destacó la superfacultad del Poder Ejecutivo para realizar modificaciones al presupuesto aprobado por el Poder Legislativo, con un exceso de gasto frente a lo autorizado por la Cámara de Diputados y la Cámara de Senadores.
