La Comisión de Preservación del Medio Ambiente, Cambio Climático, Protección Ecológica y Animal, en el Congreso de la Ciudad de México, aprobó reformas a la Ley de Protección de los Animales de la capital.
Las reformas buscan prohibir que los dueños de mascotas sometan a los animales a tatuajes con fines estéticos o a perforaciones en el cuerpo parar colocarles aretes como algo decorativo.
El objetivo es evitar sufrimiento “innecesario” a los animales de compañía, explicó la diputada independiente, Teresa Ramos, presidenta de la comisión.
“Esta iniciativa tiene como finalidad la prohibición de revisar y ordenar la realización de tatuajes, perforaciones con fines estéticos, ornamentales en animales de compañía, someterlos a procedimientos dolorosos, invasivos con repercusiones susceptibles a infección”.
El dictamen aprobado establece sanciones de 150 a 300 veces la Unidad de Medida y Actualización, que este año equivalen a multas de 13 mil 443 a 26 mil 886 pesos.
Las sanciones son contra las personas infractoras que realicen y contribuyan en estas acciones, es decir, los dueños o quien haga el tatuaje o perfore al animal.
La nueva ley establece que cualquier persona puede denunciar estos casos ante las Secretarías de Salud, Seguridad Ciudadana, Agencia de Atención Animal, la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial, o las Alcaldías, y será la policía capitalina la encargada de remitir a los infractores ante el juzgado cívico.
“Para da facultad a la SSC de detener y remitir a la autoridad competente a las personas infractoras”.
También se puede denunciar ante la Fiscalía General de Justicia de la Cuidad de México, en caso de que se detecten algunos otros hechos que se consideren como delitos.
Sin embargo, la propia ley establece que sí se pueden realizar tatuajes o poner aretes, siempre y cuando sea con fines de marcaje, identificación o registro de animales, los cuales deben ser realizados bajo supervisión de un médico veterinario.
El dictamen será presentado al pleno esta semana, para que sea discutido y en su caso aprobado. De ser así, pasará a la Consejería Jurídica y de Servicios Legales de la Ciudad de México para ser analizado y publicado en la Gaceta Oficial.
