La temporada 2023 ha sido un festín para Novak Djokovic, a pesar de haber comenzado el año en la quinta posición del ranking ATP. El serbio alcanzó la gran final de Wimbledon al vencer a Jannik Sinner en sets consecutivos por 6-3, 6-4 y 7-6(4).
En enero, Nole se coronó con maestría en el Abierto de Australia, algo más que esperado, siendo el “major” que más veces ha ganado (10) y la cancha dura, la superficie que mejor domina. En junio, Djokovic no desaprovechó la inasistencia de Rafa Nadal en Roland Garros, y se coronó también en la superficie de polvo de ladrillo. Julio trajo consigo Wimbledon y de paso un libro de historia, para que el serbio apunte su nombre.
Después de conquistar su título de grand slam número 23 en Roland Garros, Djokovic impuso un nuevo récord, superando los 22 de Rafa Nadal.
Este viernes, Djokovic y Jannik Sinner disputaron la primera semifinal de Wimbledon. El serbio era claro favorito para coronarse desde antes de iniciar el torneo y lo confirmó en este partido.
El primer set se vio marcado por la contundencia y velocidad de juego del serbio, quien no tomó riesgos y comenzó ganando desde un inicio contra el italiano; el de Belgrado se quedó con el primer set por pizarra de 6-3.
Sinner mostró una mejor cara en el segundo parcial, donde mantuvo un encuentro más cerrado con el serbio. El juego se vio envuelto en polémica luego de que el juez sancionara como “hindrance” un grito de Djokovic en un punto contra Sinner. La realidad es que, de manera inusual, el grito del serbio no se dio durante el revés que realizó, sino que lo dio una vez que la pelota estaba en cancha del italiano, a punto de dar el bote; el juez terminó otorgando el punto a Sinner. A pesar de ello, Djokovic se sobrepuso y dominó el segundo set por 6-4.
Sinner trató de emular las grandes actuaciones del serbio y se metió en el juego con más concentración que nunca, sacando puntos importantes y realmente presentándose como un digno oponente para Djokovic. El italiano se adelantó en el marcador, pero Nole no tardó en alcanzarlo y no se pudieron sacar ventaja, aunque Sinner siempre tuvo la mano arriba. Djokovic demostró una vez más porqué es uno de los mejores de todos lo tiempo al salvar dos bolas de set cuando se encontraban 5-4 favor Sinner. Djokovic igualó el juego y el tercer parcial se fue a tie-break, donde Djokovic se lo quedó por 6-4, y el tercer set 7-6(4).
Más de una década después, Djokovic sigue más de una década invicto en la Cancha Central del All England Club de Wimbledon, pero esta vez, va más que nunca por la eternidad, en la final que se disputará este domingo.
Djokovic espera al ganador del partido entre Alcaraz y Medvedev.
Por Jaime Gómez Torres e imagen de zhukovsky.Depositphotos
