Julio Urías lanza con maestría en la victoria de los Dodgers

Los Dodgers se quedaron con la serie contra los Piratas de Pittsburgh, ganando tres de los cuatro juegos. Pero lo que es aún más importante, parece ser que los angelinos han recuperado a la versión de Julio Urías, que tanto les hacía falta.

En la victoria de anoche 5-2 de los Dodgers, Julio fue pieza clave, ayudando a una rotación que había padecido de profundidad.

En la primera entrada, los Dodgers rápidamente se adelantaron. Mookie Betts abrió el juego con un doble y Freddie Freeman llevó a ambos a home con un batazo monstruoso, que puso la pelota en lo más profundo de jardín derecho.

 A pesar de la temprana ventaja de los Dodgers, los Piratas lo empataron rápidamente. Urías, quien parecía tener un buen juego, luego de retirar en orden la primera entrada, otorgó dos carreras en la segunda entrada. La realidad es que nada podía hacer el “Culichi” para evitarlas. Connor Joe se embasó en un buen batazo, pero un mal fildeo de David Peralta en jardín izquierdo, le permitió a Joe llegar hasta tercera, en un doble de Jack Suwinski, que no debió haber sucedido. El novato Nick Gonzales fue el encargado de impulsar ambas carreras para empatar el juego, con un doble por la línea de tercera, donde Max Muncy estuvo mal colocado y no logró llegar a la pelota.

La frustración del “Culichi” fue notoria, luego de una buena primera entrada, parecía que otra vez no iba a poder controlar el fuego. Pero no fue el caso, la frustración solo impulsó a los Dodgers ha sacar una victoria vital.

Luego de la desastrosa segunda entrada, Urías volvió a la versión a la que tenía acostumbrado a los aficionados de LA, forzando a los bateadores a pegar “rodados” y además tirando “fuego”.

Salvo la segunda entrada, el mexicano dominó el partido. Urías terminó la noche con una línea de: 6 IP, 3 H, 2 R/ER, 1 BB, 8 Ks y enfrentando a 22 bateadores en el juego. Cabe destacar que el serpentinero realizó 86 lanzamientos, y aunque hubiera podido continuar en la séptima entrada, el manager, Dave Roberts, prefirió no forzar la salida de Urías.

Los Dodgers retomaron la ventaja en la sexta entrada, con un doble de Freddie Freeman y un “bambinazo” de Muncy que se voló la barda de jardín central.

Max Muncy brilló en la “esquina caliente”, siendo vital en el triunfo de los Dodgers, luego de sacar 5 outs en el juego y batear las carreras de la ventaja.

Alex Vesia fue el encargado de cerrar el juego y conseguir el salvamento, para que los Dodgers ganaran 5-2, y mejoraran a una marca de 49-38.

Con el triunfo de los Dodgers, los “chicos de azul” recortaron distancia en la división Oeste de la Liga Nacional. Con la derrota de los Diamondbacks de Arizona (50-38), primer lugar en el Oeste, 9-0 contra los Mets; los Dodgers están a tan solo medio juego del liderato de su división.

Cabe recordar que esta temporada la rotación de los Dodgers no cuenta con Walker Buehler, quien fue sometido a cirugía de Tommy-John. Dustin May, quien fue vital en la rotación al inicio de la temporada, tampoco volverá a la lomita este año, el equipo anunció que deberá pasar por el quirófano para una reparación del tendón flexor de su codo derecho. A la lista de lesionados se sumó Clayton Kershaw, quien entró en la lista de 15 días, retroactivo al 30 de junio.

Urías también fue baja, su última apertura la había hecho el 18 de mayo y regresó el pasado 1 de julio, luego de presentar molestias en el tendón de la corva, por lo que el tenerlo de vuelta y en buena forma, es un nuevo aire y un aliento de esperanza para la temporada de los Dodgers.

Por Jaime Gómez Torres e imagen de Espacio Deportivo